Leyendas o verdades? relacionadas con el oratorio II

Jesús Nazareno de la Divina Misericordia


Yolandito como se le conoce cariñosamente, a quién viste a nuestras queridas imágenes, ha afirmado varias veces que cuando se le cambia la ropa al Nazareno se pone colorado.
El Nazareno de la Divina Misericordia, una imagen muy venerada, que como vimos este año salió con un manto y el sudario, mostrando el resto de su cuerpo. Se ha convertido en una tradición que el sudario se cambie únicamente para ocasiones importantes, por lo que las pocas veces que se la ha cambiado, afirma el mayordomo de la imagen, se ha puesto colorado.
"Ahora buscó estar en gracia de Dios para que cuando tenga que estar cambiándole lo poco que se le cambia pues no se ponga colorado." dice él.

Recordemos que otra leyenda cuenta que la Virgen María al ver a su Hijo desnudo a punto de ser crucificado le dió el mantico para que se cubriera. Pero esto es solo una tradición piadosa.


Otra de las anécdotas relacionadas con el Nazareno es que fue mandado hacer para la Virgen de Dolores, la Bendecida y Veneradisíma Imagen que ahora ya no sale en procesión y que se mantiene en su camerín. Algo similar le paso a la Virgen de Dolores de la Parroquia de la Santa Cruz, la Parroquia Vieja.


La imagen fue trabajada en una técnica parecida a la de tela encolada, años después se le trabajo el cuerpo. Originalmente era una nazareno pero la posición del cuerpo ha obligado que en los últimos años salga como Señor de la Caída, debido a que el equilibrio de la imagen se pierde al procesionarse.


El bellísimo trabajo que tiene la imagen en el cuerpo y los constantes cambios en el ropaje han obligado ha que únicamente use el sudario, dalmáticas, mantos, con el objeto de proteger detalles como el de la sangre, que por su técnica, tiende rápido a deteriorarse. El Yacente posee la misma técnica por lo que nunca ha usado túnicas.


Muchas historias se han entrelazado a lo largo del tiempo en relación a esta imagen, la más conocida es aquella que cuenta ...
Una señora estaba en el borde de la muerte, pero la familia afligida al ver su agonía y que no moría, le súplico al Nazareno que se la llevará rezando la Coronilla de la Divina Misericordia. Y entonces murió. El Nazareno de la Divina Misericordia estuvo presente en su casa mientras traían el carro fúnebre.

Jesús abrió sus brazos mientras dejaba este mundo y la conducía al otro. Esta historia fue representada en la velación del 10 de marzo, fecha en que se conmemora el calificativo de su nombre de la " Divina Misericordia".

Continuará.....

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